El jugador de Independiente que finalmente se quedará en 2026 :: Olé

Confiar. Apostar. Y a partir de esa confianza, construir. Esas son las bases del pensamiento de un Gustavo Quinteros que ya está moldeando a su Independiente del 2026. Y la lógica aplica a la zaga central, una parte de la cancha que se convirtió en una de las zonas donde GQ prefiere seguir contando con los suyos de cara al año entrante. El mejor ejemplo es el de Nicolás Freire, quien acordó su continuidad en el club por pedido expreso del entrenador.
El plan de Quinteros con Freire
Con Kevin Lomónaco y Sebastián Valdéz como fijas, Freire es para Quinteros la primera opción desde el banco. Por lo menos hasta que Juan Manuel Fedorco sea evaluado en la pretemporada -Franco Paredes corre desde atrás- y mientras Cumbia no sea transferido al exterior. En el abanico de variantes también están los pibes Nicolás Garrido, Fernando Closter y Gonzalo Bordón, aunque el deté apunta a llevarlos de a poco para que no quemen etapas.
Es por esto que, lo que hace meses parecía una salida cantada, ahora es continuidad: el ex Inter Miami arregló con la dirigencia prolongar su cesión en el conjunto de Avellaneda hasta diciembre de 2026, con una opción de compra que aún resta definir (en su primer préstamo era de 1.200.000 dólares por el 80% del pase).
Quinteros confía en Freire
¿El plan de Quinteros? potenciarlo y convertirlo en una solida alternativa antes que salir a buscar otro apellido en un mercado que tiene como objetivo traer poco y a bajo costo, además de vender para oxigenar las carcas del club.
“Me sentía un ex jugador cuando llegué a Independiente”, había declarado hace un tiempo Freire cuando le tocaba tener sus primeras titularidades en el equipo aún dirigido por Julio Vaccari. La realidad es que su 2025 se vio condicionado de lleno por el reacondicionamiento que le demandó esa lesión de ligamentos cruzados que sufrió en 2024, lo que lo llevó a alternar buenas y malas dentro de la cancha.
Es por eso que esta oportunidad de extender su estadía en el CAI es también un desafío personal: ya en mejores condiciones y en plena víspera de una pretemporada que le permitirá terminar de ponerse en el punto ideal desde lo físico, el central también desea relanzarse en el país. A los 31 años y con experiencia acumulada, Freire sabe que puede consolidarse si muestra el nivel que lo destacó en Argentinos Juniors y que lo llevó a jugar en Uruguay, Países Bajos, Brasil, Ecuador, México, Grecia y los Estados Unidos. Hay final Freiliz…
Fuente: www.ole.com.ar








